La comisión de empalme del nuevo gobierno de Gustavo Petro hizo su balance sobre lo recibido del gobierno saliente de Iván Duque. La conclusión muestra que los números están en rojo, por lo que las propuestas que trae el presidente electo no pueden implementarse de inmediato.
“La realidad fiscal del país es una gran preocupación, el nivel de endeudamiento y de déficit fiscal que encontramos para el próximo cuatrienio es crítico, por lo tanto, la reforma tributaria que cursará en el Congreso de la República, con carácter prioritario, se nos convierte en una reforma imprescindible para llevar a cabo la propuesta de gobierno”, explicó Daniel Rojas, uno de los integrantes de la comisión de empalme.
Asimismo, Mauricio Lizcano, director del equipo de empalme, aseguró que “esta situación no hay que verla con espejo retrovisor, sino por el contrario, que los colombianos entiendan el estado de cómo recibimos a Colombia, pero también que el presidente tenga las herramientas y la información necesaria para tomar decisiones desde el día uno, no que empiece a caminar sino a correr en el cumplimiento de su gobierno desde el primer día”.
Uno de los aspectos más preocupantes es el fin de la declaratoria de estado de emergencia sanitaria por la pandemia del COVID-19, según la nueva ministra de Salud, Carolina Corcho, “quedan 1.800.000 colombianos sin afiliación al régimen de salud, en este momento en condiciones inciertas, y queremos dejar esto de precedente porque esas son las condiciones en que vamos a recibir el próximo gobierno”.
En cuanto a los programas que no continuarán con el nuevo gobierno, se ha hablado de una iniciativa de economía naranja, de la aspersión con glifosato ni la exploración con fracking. Por el contrario, se mantendrán la jornada única escolar, los programas de vivienda y las políticas de subsidio para poblaciones de bajo recurso y la matricula cero.