La Unidad para las Víctimas acompañó a dos familias víctimas en la diligencia de entrega digna de los cadáveres y la posterior inhumación en los municipios de Valencia y Tierralta, a través del equipo de enfoque psicosocial.
En el proceso los familiares recibieron los restos óseos plenamente identificados de sus seres queridos y la explicación del proceso judicial y de los procedimientos técnicos científicos desarrollados para este efecto.
Así mismo, la entidad garantizó la participación de los familiares, suministrando los gastos de transporte, alimentación, hospedaje y elementos fúnebres de acuerdo con sus principios. De igual manera, desde el servicio al ciudadano les brindaron asesoría acerca de la ruta de reparación integral que le permite acceso a la información de sus derechos.
Ingrid Pimienta, directora territorial de Córdoba, destacó la articulación interinstitucional como componente básico para el reconocimiento de los derechos de las víctimas y destacó la contribución de la Unidad.